Resumen de la Semana en Metales Preciosos – Abril 25 de 2020

1. Lentamente, los Estados Unidos empiezan a tomar medidas para sacar su economía de la parálisis impuesta como parte del esfuerzo por contener la propagación de COVID-19. El estado de Georgia fue el primero en intentar reabrir establecimientos comerciales, pero recibió fuertes críticas por el tipo de negocios que autorizó para la reapertura. Gran parte de la nación observa con inquietud este primer ensayo de reactivación de la economía estadounidense.

2. El número estacionalmente ajustado de estadounidenses que solicitaron auxilio estatal de desempleo cayó sorpresivamente una vez más, para la semana que terminó el 18 de abril. El número anticipado de reclamos para esta semana fue de 4.427.000, una disminución de 810,000 solicitudes, en comparación con las cifras revisadas de la semana que finalizó el 11 de abril. La revisión de las cifras de la semana anterior arrojó 8.000 reclamaciones menos que las estimaciones iniciales. El promedio móvil cuadrisemanal de solicitudes aumentó nuevamente esta semana: 280.000 reclamaciones de más, en comparación con el promedio revisado de la semana previa, para un nuevo total de 5.786.500. La revisión del promedio móvil cuadrisemanal de la semana anterior arrojó 2.000 solicitudes menos que lo proyectado. Es de esperar que las cifras de desempleo se mantengan altamente volátiles a medida que la nación reabre la economía. Muchos estados aún tienen problemas con sus anticuados sistemas de desempleo, por lo que es de esperar que continúen revisando estas cifras en el corto plazo. El total de estadounidenses desempleados en las últimas cinco semanas alcanzó la sorpresiva cifra de 26,4 millones; esta cifra supera el número de puestos de trabajo recuperados desde la Gran Recesión de 2008.

3. La confianza de los consumidores estadounidenses cayó por tercer mes consecutivo en abril, conforme continúa la parálisis económica provocada por la propagación de COVID-19. Richard Curtin, economista jefe de las Encuestas de Consumidores, dijo en un comunicado que «las reacciones de los consumidores a la relajación de las restricciones serán fundamentales, ya sea que pongan presión sobre los estados para que reabran sus economías o para que extiendan las restricciones —aún cuando éstas acarreen consecuencias negativas sobre las proyecciones económicas—. Los riesgos asociados a estas dos decisiones no tienen igual peso; una decisión equivocada de reapertura tiene graves repercusiones». Curtin continuó, advirtiendo sobre las posibles consecuencias de estados que abren sus economías antes de tiempo: «la necesidad de reimponer restricciones podría causar un pesimismo más profundo y duradero en todos los consumidores, incluso en aquellos que viven en estados que no relajaron sus restricciones».

4. El viernes, el presidente Donald Trump firmó un nuevo paquete de ayuda de $484 mil millones de dólares, luego de que el Congreso aprobara el proyecto de ley de manera memorable el jueves. Los miembros del Congreso usaron tapabocas y debatieron el proyecto de ley siguiendo las nuevas directrices de «distancia social», que les exigían turnarse para entrar en las cámaras, en números limitados. El nuevo paquete de ayuda en respuesta al coronavirus —ya el cuarto en aprobarse— asigna $370 mil millones de dólares adicionales para el «Programa de Protección de Sueldos» (Paycheck Protection Program) destinado a las pequeñas empresas. El resto de los fondos se utilizarán para apuntalar hospitales en dificultades para cubrir los costos y aumentar la cantidad de kits de prueba disponibles para detectar la enfermedad.

5. Mientras que el Congreso trabaja para salvar a las pequeñas empresas, el primer minorista de gran superficie podría declararse en bancarrota este domingo. Según informes, Neiman Marcus está en conversaciones con sus prestamistas actuales para solicitar cerca de $600 millones de dólares en financiamiento de emergencia, para costear operaciones a través de una reestructuración. El minorista utilizaría su radicación de bancarrota para eliminar casi $4 mil millones de deuda que han afligido esta firma de lujo, desde su venta en el 2013 a Ares Management y la Junta de Inversiones del Plan de Pensiones de Canadá. La totalidad de sus tiendas han permanecido cerradas desde el 17 de marzo y ha puesto en licencia la mayoría de sus 14,000 trabajadores. Esta bancarrota podría ser la primera de muchas, puesto que los minoristas de grandes superficies se enfrentan al hecho de que deben hacer pagos por alquiler o usufructo de propiedades que no han generado ingresos en meses. Muchos no estaban preparados para pasar de operaciones convencionales en espacios físicos a operar totalmente como negocios en línea, y han sufrido pérdidas devastadoras a expensas de Amazon, Walmart y Target.

6. La reacción contra el manejo que China dio al coronavirus, ahora convertido en pandemia, no se ha hecho esperar. Eric Schmitt, el fiscal general del estado de Missouri, presentó una demanda contra el gobierno chino esta semana acusándolo de negligencia en su manejo inicial del brote de virus. Schmitt dijo en un comunicado que «el gobierno chino mintió al mundo sobre el peligro y la naturaleza contagiosa de la COVID-19, silenció a los denunciantes e hizo poco para detener la propagación de la enfermedad. Deben rendir cuentas por sus acciones».

En otros tribunales de los Estados Unidos, se han presentado demandas similares en nombre de propietarios de negocios. Los Estados Unidos no son el único país que considera este curso de acciones y China está respondiendo airadamente —no sólo a los Estados Unidos— sino también a Alemania, Australia y el Reino Unido. En todas estas naciones, centros de estudios y funcionarios gubernamentales han comentado públicamente la posibilidad de reclamarle a China una indemnización por el daño económico causado por la propagación de COVID-19, fuera de Wuhan, ciudad donde se originó el brote.

7. Rusia decidió que intentará mantenerse neutral mientras los Estados Unidos investigan los orígenes y medios de propagación del coronavirus por fuera de China. Dmitry Peskov, un portavoz de Vladimir Putin, se pronunció sobre informes que afirman que organizaciones de inteligencia estadounidenses están investigando si el virus salió accidentalmente de un laboratorio chino. Peskov dijo: «Nuestros dos presidentes nunca discutieron este tema. No creemos que una investigación sobre la fuente del virus sea algo en lo que podamos prestar apoyo, por lo tanto no creemos que sea apropiado intentar investigar y culpar a ninguna nación del mundo por este virus sin tener evidencia alguna».

8. El viernes, el Banco de Rusia redujo la tasa de interés de referencia en 50 puntos básicos e insinuó que se discutirán nuevas reducciones en futuras reuniones de política monetaria. El banco central ruso también redujo sus previsiones económicas para 2020 y proyectó que el Producto Interno Bruto (PIB) de Rusia podría caer entre un 4 y un 6 por ciento en este año. El banco añadió que espera que el crecimiento se recupere entre un 2,8 y 4,8 por ciento en 2021, y entre un 1,5 y un 3,5 por ciento más en 2022. En un comunicado publicado el viernes, el banco se pronunció: «la dinámica de la recuperación económica dependerá, en gran medida, de la escala y eficacia de las acciones que tomen el gobierno y el Banco de Rusia para mitigar las consecuencias de la pandemia del coronavirus».

9. Michel Barnier, principal negociador del Brexit para la Unión Europea, criticó el viernes al Reino Unido después de una segunda semana de conversaciones entre Bruselas y Londres, desde el inicio de la pandemia. Según Barnier, el Reino Unido «ha impuesto un calendario muy riguroso, extremo para una negociación tan importante». Barnier acusó al Reino Unido de no avanzar en las conversaciones, diciendo: «el Reino Unido no puede imponer este calendario tan corto para las negociaciones y al mismo tiempo no moverse, no progresar en ciertos temas de importancia para la Unión Europea». El Reino Unido tiene hasta junio para decidir si extenderá su período de transición, después de éste, se asume que se fija la fecha original del 31 de diciembre de 2020.

10. El petróleo crudo tuvo una semana récord; por primera vez en la historia, alcanzó precios negativos. Los precios negativos significan que, prácticamente, los productores de petróleo pagan a los compradores para que se queden con el petróleo, conforme disminuye la capacidad de almacenamiento y se hunde la demanda. Por un momento el lunes, el U.S. West Texas Intermediate (WTI) se transó a menos $37,63 por barril. La expiración de los contratos de futuros el martes provocó este descenso. El vencimiento significa que los comerciantes se verían obligados a recibir el petróleo que habían comprado anteriormente y a buscar donde almacenarlo, o de lo contrario, a venderlo a alguien —aparentemente, a cualquier precio—. Incluso con los recortes de producción de carácter histórico que anunció la semana pasada la OPEP+, la capacidad de almacenamiento en todo el mundo disminuye, según la oferta supera con creces la demanda.

11. El euro se movió frente al dólar estadounidense en una serie de picos y valles, con una tendencia global a la baja casi toda la semana. En la primera mitad de la semana, el euro se movió ligeramente por debajo del dólar, pero la tendencia a la baja se aceleró durante la segunda mitad de la semana. El viernes, el euro alcanzó los valores mínimos de la semana y luego rebotó más alto que el dólar; con todo, perdió impulso y se niveló antes del cierre. El euro cerrará la semana por debajo del dólar estadounidense. Esta semana, los movimientos del yen frente al dólar estadounidense también fueron volátiles, aunque ocurrieron en un rango más estrecho. El yen cayó casi verticalmente por debajo del dólar, poco después de la apertura. Inmediatamente recuperó terreno y luego descendió aún más, tocando —temprano el lunes—los valores mínimos de la semana. El gráfico del dólar/yen de esta semana está lleno de picos y caídas agudas que cubren territorio positivo y negativo. A finales del jueves, el yen se hundió verticalmente de nuevo, pero recuperó territorio prontamente. Hasta la noche del jueves, el yen se tendió a la baja, pero repuntó el viernes y cerrará la semana en territorio positivo frente al dólar estadounidense.

Esta semana, países del mundo tomaron medidas provisionales para reabrir sus economías. Alemania e Italia permitieron que ciertas tiendas reabrieran el lunes a medida que relajan las restricciones. En los Estados Unidos, el estado de Georgia también permitió que las tiendas reabrieran el jueves, aunque enfrentó muchas críticas por autorizar la apertura de algunos negocios no vitales. Spas, salas de tatuajes y salones de belleza se incluyeron en la lista de negocios que el gobernador de Georgia facultó para reabrir. En Alemania, los minoristas de menos de 800 metros cuadrados podrán reabrir siempre y cuando ellos y sus clientes acaten las nuevas reglas de distanciamiento social y las medidas obligatorias de higiene. También se autorizó la reapertura de empresas grandes, como concesionarios de automóviles y tiendas IKEA. Reuters informó sobre un IKEA en las afueras de Colonia; su gerente dijo que «no había filas, ni multitudes».

Ahora que algunas tiendas han recibido autorización para abrir, los minoristas podrían encontrar que la continua incertidumbre sobre el desempleo ha hecho que, los clientes ávidos y fieles de otrora, se queden en casa aferrándose a sus carteras. Aún si los clientes regresan en masa a las tiendas, las nuevas políticas y protocolos diseñados para limitar la transmisión adicional del virus podrían afectar gravemente sus hábitos de consumo. En un escenario de este tipo, los minoristas no podrán atraer el número de clientes que tuvieron antes de la pandemia. Las prevenciones que meses de distanciamiento social y miedo al contagio han arraigado en los consumidores —como restricciones al contacto de superficies y objetos— podrían haber cambiado significativamente el comportamiento de los consumidores. Así, los fabricantes podrían necesitar formas radicalmente nuevas de comercializar sus productos a una nueva generación de consumidores con fobias táctiles.

El Reino Unido parece avanzar en su intento de finalizar el período de transición para salir de la Unión Europea antes de la fecha estipulada, 31 de diciembre de 2020. La Unión Europea desde ya hace todo posible para convencer al resto del mundo de que el plazo es demasiado corto y de que no hay manera de llegar a un acuerdo para entonces. Si el mes de junio pasa sin que el Reino Unido solicite una prórroga, podríamos ser testigos de la «ruptura dura» con la Unión Europea que todos temían, previo a la propagación mundial de la COVID-19.

En los Estados Unidos, la población se impacienta por la continua parálisis de una economía que fue bastante dinámica hasta finales de enero. La nación observa detenidamente como evoluciona la decisión del gobernador de Georgia de autorizar la reapertura de establecimientos comerciales.

La propagación de COVID-19 también ha sacado de curso la contienda electoral por la presidencia. Luego de la salida de Bernie Sanders de la competencia, los demócratas se alinearon con Joe Biden como su candidato oficial contra Donald Trump para las elecciones de noviembre. La propagación del virus también ha alterado las habilidades de los analistas para hacer predicciones confiables sobre los resultados de las elecciones. Donald Trump enfrenta constantes críticas mediáticas por el manejo del brote; los medios de comunicación diseccionan cada comentario que hace en las ruedas de prensa diarias. Los partidarios de Trump podrían reaccionar en su contra, si la reapertura de la economía estadounidense no transcurre bien y sus ciudadanos se ven obligados a confinarse nuevamente varios meses. Un escenario opuesto sería uno en el que los votantes decidan que no quieren cambiar de mandatario en medio de la crisis.

Es poco probable que para noviembre la crisis esté bajo control.
Aún cuando el virus deje de propagarse a las tasas actuales, la mayoría de los analistas coinciden con el diagnóstico del Fondo Monetario Internacional: se avecina una recesión mundial como consecuencia del daño causado por el virus. La consecuente crisis económica que enfrentarán todas las naciones del planeta será uno de los obstáculos más difíciles de superar en la historia reciente.

Los inversionistas expertos continúan tomando medidas para asegurar la adecuada diversificación de sus portafolios en un intento por hacerle frente a la crisis económica que se aproxima. Muchos inversores empezaron a acumular metales preciosos en físico —mucho antes de que la crisis estallara— con el propósito de añadir otro tipo de activos a sus portafolios y así reducir la exposición a valores de renta variable. De estos inversionistas, muchos continuaron aumentando la cantidad de metales físicos en sus carteras conforme la crisis se profundizó y aprovecharon las caídas en los precios de los metales preciosos para adquirirlos con descuento.

Recuerde que los metales preciosos siempre deben ser vistos como una inversión a largo plazo y que la clave para la rentabilidad es adquirir, poseer los productos físicos y mantenerlos a largo plazo. Tenga siempre presente que no debe abusar de su capacidad de mantener la propiedad de sus metales preciosos a largo plazo.

Departamento Comercial—Precious Metals International, Ltda

Cierre de viernes a viernes (precios de cierre Nueva York

Comparaciones de años previos

Niveles de Soporte y Resistencia a corto plazo para la semana siguiente.

Esta no es una solicitud de compra o venta.
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