Resumen de la Semana en Metales Preciosos – Abril 11 de 2020

1. Esta fue una semana corta de negocios en la bolsa por el cierre de mercados el viernes, en observación de las celebraciones de Viernes Santo y Pascua judía. La volatilidad del mercado se mantiene a niveles extremos; titulares y noticias relacionados con la pandemia en curso hacen tambalear los mercados. Los Estados Unidos se mantienen a la cabeza de los rankings de COVID-19 con el mayor mayor número de casos, mientras que Nueva York sigue siendo uno de los focos más grandes de infecciones.

2. El número estacionalmente ajustado de estadounidenses que solicitaron auxilio estatal de desempleo cayó sorpresivamente para la semana que terminó el 4 de abril. La comparación de las cifras revisadas de la semana del 28 de marzo —6.867.000— con las cifras ajustadas del 4 de abril —6.606.000— muestra una disminución de 261.000 solicitudes. La revisión del número de reclamaciones de la semana previa arrojó 219.000 solicitudes de más que el número ajustado, para un total de 6.867.000. El promedio cuadrisemanal de solicitudes tuvo otro abrupto aumento.

Esta media fue de 4.265.500 para la semana que cerró el 4 de abril, un incremento de 1.598.750 de reclamaciones, en comparación con el promedio cuadrisemanal revisado para el 28 de marzo. La revisión del promedio cuadrisemanal del 4 de abril dio 54.750 solicitudes de más que el promedio ajustado, para un total de 2.666.750. Se espera que la alta volatilidad en los datos de desempleo se mantenga y es probable que se establezcan nuevos récords. Los métodos de recolección de datos de desempleo del gobierno se han mostrado anticuados en la situación actual y han fallado en tratamiento de los aumentos en las cifras. Es muy probable que los datos publicados no reflejen el verdadero nivel de la crisis que atraviesa el mercado laboral estadounidense como consecuencia de la propagación del coronavirus.

3. Los gobiernos federal, estadual y local siguen urgiendo a los ciudadanos estadounidenses para que permanezcan en casa y así ayudar a enlentecer la propagación del coronavirus. A pesar de que el número de solicitudes de auxilio estatal de desempleo disminuyó esta semana, el número de desempleados en los Estados Unidos ya supera los 16 millones. Prácticamente, toda la nación ha cesado actividades, con la excepción de los servicios que los gobiernos llaman “esenciales”, como supermercados, servicios de infraestructura, productores de alimentos, socorristas y personal militar.

A lo largo y ancho del país, muchos restaurantes ubicados en avenidas concurridas trataron de mantener sus ingresos a través de domicilios y recibiendo órdenes para recoger. No obstante, el modelo de negocio no funciona en un entorno en el que se insta a los ciudadanos a permanecer en casa. Es posible que muchos de los negocios que se han visto obligados a cerrar por el brote no tengan los medios para reabrir una vez la situación se acerque a la normalidad. Aún cuando mengüe el brote, la mentalidad y los hábitos de compra de los consumidores estadounidenses y del resto del mundo podrían cambiar radicalmente, a consecuencia de las prácticas de aislamiento social a las que se han tenido que adaptar.

4. Los esfuerzos para llevar más ayuda financiera a los más de 16 millones de desempleados en Estados Unidos se estancaron en Washington, antes de que el Congreso suspendiera sesiones por el receso de Pascua. El gobierno de Trump cumplió la promesa del Secretario del Tesoro de regresar al Congreso para pedir más dinero, si se agotaban los fondos existentes. A principios de semana, el gobierno intentó obtener más fondos para los afectados por la parálisis económica y pidió al Congreso la rápida aprobación de $250 mil millones más. La solicitud de financiación adicional fue bloqueada en el Senado, después de que republicanos y demócratas fallaran en ponerse de acuerdo sobre el destino del dinero. Los republicanos argumentaron que el programa de préstamos para pequeñas empresas —cuyos fondos se están agotando rápidamente tras su lanzamiento inicial la semana pasada, a pesar de las dificultades para poner en marcha los portales de solicitud en línea— deberían ser el objetivo de los nuevos fondos. En cambio, los demócratas instaron a que los fondos se destinaran a hospitales y gobiernos estatales y locales. La Cámara de Representantes tenía programada una sesión de carácter procedimental para el viernes, pero no se esperaba que decidiera sobre la financiación adicional.

5. El jueves, ante el casi estancamiento del Congreso en materia de fondos adicionales de ayuda, la Reserva Federal decidió utilizar los fondos del Departamento del Tesoro para adquirir bonos municipales y aumentar la compra de bonos corporativos. La Reserva Federal espera que tal medida ayude a apuntalar las empresas. Asimismo, espera que estas operaciones proporcionen los fondos tan desesperadamente necesitados por los gobiernos estaduales y locales, quienes actualmente luchan contra la propagación del coronavirus con presupuestos apretados.

6. En Estados Unidos, los precios al consumidor tuvieron la mayor caída en cinco años a debido a la baja demanda de gasolina y otros insumos relacionados con el transporte aéreo. Las tarifas de hoteles y billetes de avión colapsaron conforme se tomaron medidas de confinamiento a nivel mundial, en un intento —al parecer fallido— de detener el avance de la pandemia. Los precios de la gasolina, ya bajos como consecuencia de la guerra de precios entre Rusia y Arabia Saudita, vieron nuevas disminuciones a medida que viajeros y turistas dejaron de conducir. Daniel Silver, economista de JPMorgan, dijo: «En términos de la medida básica, la caída de marzo registró los precios más bajos documentados, debido a grandes disminuciones récord en los precios de tarifas aéreas, […] alojamiento, […] y ropa». Actualmente, los economistas se esfuerzan por determinar la magnitud de los datos de inflación del mes de abril. Con la parálisis económica en todo el mundo, los economistas empiezan a notar que sus algoritmos informáticos no pueden generar datos precisos. Los ingenieros de software conocen este problema como error de “división por cero” (Divide-By-Zero error), cuyo resultado siempre es “indefinido”.

7. Según se informa, Boris Johnson, Primer Ministro del Reino Unido, fue dado de alta de la unidad de cuidados intensivos esta semana. Johnson fue admitido en esta unidad luego de que se diagnosticara que los síntomas que padecía como consecuencia de la COVID-19, requerían de más atención que la que podía recibir en casa. Johnson tuvo la desdicha de ser el primer líder de gobierno en el mundo en ser diagnosticado con la enfermedad. El viernes, luego de un aumento récord en muertes por día causadas por COVID-19, el Reino Unido emitió consejos para que sus habitantes permanecieran en casa.

8. La OPEP+ se reunió esta semana y llegó a un acuerdo para hacer nuevos recortes en producción. Esta medida tiene por fin tratar de compensar la caída de los precios del petróleo que comenzó con la guerra de precios entre Rusia y Arabia Saudita. Esta guerra inició justo cuando el coronavirus salía de China para convertirse en una verdadera pandemia, y llevó los precios del petróleo al colapso. Al parecer, el grupo acordó cortar 10 millones de barriles por día, cerca del 10 por ciento de la producción normal, durante los meses de mayo y junio. En una declaración publicada después de la reunión, la OPEC dijo que los recortes fueron «acordados por todos los miembros de la OPEC y países productores de petróleo no miembros de la organización que participaron de la Declaración de Cooperación, con la excepción de México, por lo que el acuerdo depende del consentimiento de México». El Secretario de Energía de México dijo en un trino, después de la reunión, que su país estaría dispuesto a reducir la producción en 100.000 barriles por día, durante los próximos dos meses. Según se informa, la OPEC+ les había pedido que redujeran la producción en 400.000 barriles, por lo que no queda claro si la propuesta mexicana podría entenderse como el “consentimiento” que busca la OPEC+. El jueves, a pesar de las noticias del acuerdo, el West Texas Intermediate de Estados Unidos cayó más de 9% para transarse a $22.76 por barril; mientras que el crudo Brent, el punto de referencia internacional, cayó más de 4% para venderse a $31.48 por barril.

9. El euro bajó un poco frente al dólar estadounidense al comienzo de la negociación, pero inició un claro movimiento al alza en las primeras horas de la mañana del martes que duró hasta el mediodía. Finalizando martes, el euro invirtió curso y bajó hasta el jueves, cuando reanudó su tendencia al alza. Finalizando el jueves, después del cierre, el euro empezó a subir, para luego moverse lateralmente y cerrar la semana al alza, frente al dólar estadounidense. El yen japonés repuntó más alto que el dólar, pero luego cayó repentinamente la noche del domingo, al inicio de la semana de operaciones. El lunes en la mañana, el yen llegó a los niveles más bajos de la semana y luego inició una tendencia al alza, describiendo una serie de picos y valles agudos hasta finalizar el martes. En las primeras horas de la mañana del miércoles, el yen vio una ligera inversión e inició su curso a la baja, siguiendo un patrón similar de picos y valles hasta el jueves, cuando regresó a valores positivos. El yen fue capaz de mantenerse en valores positivos, a pesar de un ligero descenso a última hora de la noche del jueves; terminará la semana ligeramente al alza frente al dólar estadounidense.

En el futuro previsible, la COVID-19 será el principal foco de noticias para todos los medios de comunicación y las cadenas informativas de negocios. El brote del virus ha desencadenado una parálisis económica mundial que, a pesar de las lecciones aprendidas de la gripa española de 1918, ha llevado a la actual economía —interconectada a nivel mundial— a un territorio desconocido. Se espera que las empresas a lo largo y ancho de los Estados Unidos permanezcan cerradas durante la mayor parte de abril debido a la continua propagación del virus. Situaciones similares se replican en todo el mundo a medida que la mayoría de los países se esfuerza por contener el avance del virus entre sus pobladores.

A nivel mundial, un exceso de moneda fiduciaria empieza inundar el sistema, a medida que los gobiernos y los bancos centrales intentan frenar la devastación económica en curso como consecuencia de las medidas de aislamiento en casa. Gobiernos y bancos centrales han propuesto paquetes de ayuda y rescate de tamaños que no tienen precedentes. El impacto de la producción de tanto dinero sin respaldo será indudablemente sobrecogedor.

Actualmente, el gobierno de los Estados Unidos está haciendo préstamos a pequeñas empresas que podrían ser condonados si el empleador mantiene a la mayoría de sus empleados en la nómina durante la crisis. Asimismo, está enviando directamente fondos a sus ciudadanos, de los que ya más de 16 millones se han declarado desempleados. Aún no está claro si el gobierno espera que esos fondos sean devueltos de alguna manera. El virus ya empieza a afectar el suministro de frutas y verduras frescas, según los agricultores se encuentran sin su suministro normal de trabajadores migrantes en el pico de la época habitual de cosecha.

Deborah Elms, directora ejecutiva del Centro de Comercio Asiático, cree que los gobiernos se volverán más proteccionistas a medida que intentan contener el daño económico causado por el virus. Elms dijo en el segmento “Conexión Capital” de la cadena CNBC que «cabe esperar una ola mucho mayor de proteccionismo en el corto plazo que afectará no sólo a suministros médicos… sino que también comenzará a afectar [el suministro de] alimentos». Elms continuó:

«A medida que los países se ponen nerviosos por las reservas y suministros de alimentos, la seguridad alimentaria, impedirán la exportación o restringirán la importación de productos alimenticios». Y añadió: «A medida que se agudiza la crisis económica, la respuesta de muchos gobiernos será ayudar a industrias favorecidas, sectores favorecidos o sectores en que la catástrofe les preocupa de manera especial, especialmente en materia de empleo. Y muy seguramente, responderán con medidas proteccionistas. Pero para cada país, esa es la solución que tiene sentido: restringir el comercio, concentrarse en su país, mantener a su población empleada como sea posible y no preocuparse por nadie más. Pero, por supuesto, el resultado neto es que todos están en peor situación».

Conforme la volatilidad del mercado continúa oscilando desenfrenadamente, los inversionistas se mantienen cautelosos de no exponer sus carteras a otra drástica corrección del mercado. Muchos inversionistas continuaron adquiriendo metales preciosos en físico, al ver la caída de precios de los metales que ocurría simultáneamente con la venta masiva de acciones. Estos inversores consideran que la propiedad de metales preciosos físicos es una parte esencial de su plan de diversificación (y protección) de carteras, ante una mayor incertidumbre en los mercados de valores debida a los efectos duraderos de la pandemia.

Recuerde que los metales preciosos siempre deben ser vistos como una inversión a largo plazo y que la clave para la rentabilidad es adquirir, poseer los productos físicos y mantenerlos a largo plazo. Tenga siempre presente que no debe abusar de su capacidad de mantener la propiedad de sus metales preciosos a largo plazo.

Departamento Comercial—Precious Metals International, Ltda

Cierre de viernes a viernes (precios de cierre Nueva York)

Comparaciones de años previos

Niveles de Soporte y Resistencia a corto plazo para la semana siguiente.

Esta no es una solicitud de compra o venta.
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